Uno de los servicios en los que puede participar un procurador de los tribunales en Ávila es en el proceso de subastas públicas, es decir, procedimientos que pone en marcha la Administración del Estado para vender distintos tipos de bienes que han sido embargados a un deudor para el pago a sus acreedores. Esos bienes pueden incluir desde viviendas, que es lo más habitual, a garajes, solares; bienes muebles como maquinaria o mobiliario, y también vehículos, turismos o vehículos industriales.

Una de las principales características de estas subastas públicas en las que podemos asesorar en el despacho de Esperanza Tabanera Tejedor es que están abiertas a la participación de cualquier ciudadano, que puede pujar por los bienes que se subastan. Pero, para ello, hay que conocer el procedimiento de la subasta, del cual vamos a hablar en las siguientes líneas de esta entrada.

Lo primero que hay que hacer para participar en una subasta pública puesta en marcha por la Administración es identificarnos ante el secretario judicial, aceptar el conocimiento de las condiciones de la subasta y presentar un resguardo o documento que justifique el depósito en la cuenta de depósitos y consignaciones del juzgado, que es siempre el 5% del valor de salida del bien subastado.

El procurador de los tribunales en Ávila suele advertir de que muchos de estos bienes tienen cargas que hay que asumir. Lo bueno es que los precios son muy inferiores a su valor real y se pueden conseguir al 50% del precio de salida, en los casos en que el ejecutante no consiga un mejor precio en el plazo de 5 días. No obstante, si se ofrece más del 70% del precio, se adjudica al mejor postor y hay 40 días para abonar el importe que falte.

¿Subastas, embargos, posesiones...? Consulta en el despacho de procuradores de Esperanza Tabanera Tejedor.